lunes, 21 de mayo de 2007

Construcción de la trama moral

Han sido tantas décadas de malos ejemplos que no tenemos red moral. Yo soy yo y mis circunstancias. La necesidad impone que al menos por un tiempo yo sea "a pesar" de mis circunstancias. Alguien debe empezar. Y si no tuviera efecto, si hacer las cosas no alcanzara para cambiar nada que cambie al menos para mí.

Yo he podido comprobar en lo experiencial que sí cambian las cosas en lo personal y de alguna manera algo rebalsa a lo próximo.

Aquí, hoy (cada uno haga su propia lectura del aquí-hoy) todos sabemos exactamente lo que deberíamos hacer para cambiar... si fueramos otros. Lo sabemos aunque ese otro desempeñe un rol más complejo; sin embargo, no sabemos o nos importa nada (para el caso las consecuencias son las mismas) sobre lo que debemos hacer cada uno de nosotros.

Ayer ví un camión pequeño desvencijado que largaba un humo espantoso y a la cuadra otro mas. Esos dueños no se sienten responsables de los problemas ecológicos del planeta, pero lo son. Uno es responsable de colaborar en el perjuicio aunque en algún caso la falta de formación mitigue la conciencia del hecho.

La falta de consideración en levantar los residuos de las mascotas, la falta de amor en ceder un asiento, la falta de higiene a la que contribuyo tirando el papelito a la calle.

Hace unos meses atrás un auto importante abrió su ventanilla y arrojó algo a la calle. Y me indignó más porque ese señor aunque no hubiera tenido formación suficiente (que lo dudo) si le alcanzó su inteligencia para desarrollarse en un ambiente económicamente complejo. Pensé entonces que cada uno de nosotros delinquimos a nuestro nivel. Y cada uno de nosotros está esperando que el otro cambie.

Hasta que no se modifique la conducta en el interior de cada uno de nosotros, esto no cambia. Modifica lo que esté a tu alcance, de alguna manera todos somos responsables de lo que ocurra.

Toma la primera plana de cualquier diario de los próximos días o anteriores. Podrás ver el hilo común. Las noticias son síntesis de los delitos o infracciones a pequeña o gran escala. Por seguir el hilo de los accidentes de tránsito hay que convencerse que sería un mecanismo de defensa de nuestra parte creer que el problema es la niebla, o la ruta, o... esto quizá ayude pero el volmen de incidentes muestra a las claras que el problema está en nuestro interior humano. Si no rescatamos el respeto, el amor, la consideración, seguiremos leyendo las noticias que no queremos.

Y esto que tiene que ver con Dios? Todo! Se llega a Dios por ese camino interior de lo cotidiano.
Cuando tiramos un papelito en la calle estamos autorizando a otro que mate por hambre. En el hecho la responsabilidad está bien clara pero mirando las necesidades los culpables son otros.

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