Me gusta la palabra variaciones porque indica una visión diferente del tema. Quizá un impensable.
Esta es una variación de la indigencia que la proveyó el destino, la vida, el azar o Dios. Pongan el nombre que quieran.
Me escribió mi madre hoy lo siguiente:
"Tu hermana me contó que el día en que nevó le dio mucha pena un homeless y le compró un chocolate. Y le pidió que rezara por ella.El hombre le contestó que todas las noches rezaba por todos.
Y le pidió por ella que quería conseguir otro trabajo para ganar más dinero y él le contestó que el dinero no era lo más importante.
Qué lección, no?. Quería contártelo."
viernes, 13 de julio de 2007
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1 comentario:
Huauuu! esta demostrado de sobra, que el dinero no hace la felicidad pero la necedad me hace seguir buscandolo. Ahora soy más consiente de este acto y mi deseo es ser feliz, con lo que tenga mucho, poco simplemente feliz de ser y estar en este mundo.
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